Se educó a si mismo porque no hubo colegios para él. Muy jovencito, empezó a enseñar lo que sabía a quien quisiera aprender. Sin escuchar críticas, ni burlas, sin detenerse ante los ataques, siguió siempre tras su gran ilusión: lograr que cada argentino tuviera su oportunidad de educarse, haciendo "de toda la República una escuela".
En la época en que Sarmiento fomentaba la educación popular, la cantidad de analfabetos era altísima, tanto en la ciudad como en el campo.
Y a Sarmiento le costó muchísimo convencer a los poderosos de que les convenía promover la educación popular, para conservar y transmitir sus valores. Recién en 1884, durante la presidencia de Julio A. Roca, logró la sanción de su viejo proyecto de ley de educación gratuita, laica y obligatoria, que llevaría el número 1420.
http://www.elhistoriador.com.ar/infografias/11_de_septiembre/infografia_sarmiento.htmlEn la época en que Sarmiento fomentaba la educación popular, la cantidad de analfabetos era altísima, tanto en la ciudad como en el campo.
Y a Sarmiento le costó muchísimo convencer a los poderosos de que les convenía promover la educación popular, para conservar y transmitir sus valores. Recién en 1884, durante la presidencia de Julio A. Roca, logró la sanción de su viejo proyecto de ley de educación gratuita, laica y obligatoria, que llevaría el número 1420.
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El Historiador de Felipe Pigna
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